Sempiterno

Mi amor no le teme al cruel destino,

ni a las mareas del dolor,

es un latido, un fuego vivo,

que arde en mi pecho con ardor.

Esa brisa tibia en tu aliento,

ese susurro en tu sentir,

y aunque la vida imponga el tiempo,

jamás podría sucumbir.

No hay sombra que lo apague,

ni noche fría que lo haga temblar,

pues en tu alma dejo mi rastro,

como la brisa sobre el mar.

Eres lucero en mi sendero,

luz que no deja de brillar,

y aun si la oscuridad nos cubre,

serás mi faro hasta el final.

Y si los años nos deshacen,

si el mundo en ruinas deja de arder,

mi amor será un sempiterno,

un eco eterno en tu querer.

⋆★ Hassen ★⋆