Tenerte

Estar a tu lado se siente como la brisa del mar en verano, sentir tu calor me lleva a sentir la paz que al mundo entero le falta y escuchar tu voz me da la tranquilidad que solo el hogar es capaz de brindar a todo aquel que sabe su lugar de pertenencia.

Desde que tuve la dicha de conocer el mundo del que eres parte, supe que no quería explorar nada más  en este universo que no fueran aquellos cuerpos celestes a los que llamamos ojos, y que no me veía resguardada en otro lugar que no fueran tus brazos; desde el primer momento en que pude entrar a tu mundo, supe que quería hacer de ese lugar mi hogar también. 

En el momento en que nuestras galaxias colisionaron para hacerse una sola por el resto de la existencia, nuestros núcleos que eran estrellas antiguas y frías, se convirtieron en un agujero negro supermasivo emanante de radiación, que en un futuro formará nuevas estrellas, que al igual que yo, se sentirán protegidas ante tu presencia y entre tus brazos.

Amado mío, no hay momento en que no piense en ti, pues tenerte es lo que hace que mi vida tenga un sentido, durante mucho tiempo mi vida tuvo fecha de caducidad, pero cuando tus labios rozaron los míos existió por primera vez un "para siempre". A mi vida llegaste de la manera más inesperada posible, y con tu llegada miles de emociones estallaron. Cuando estoy a tu lado la felicidad es inconmensurable gracias a los eternos abrazos, besos fugaces y miradas dulces.

Te amo con la intensidad de mil soles, con la fuerza de 1,001 hombres y con la fe de un fanático.

-Cantares 4:9-10