A.

Tal vez son los páramos que nos limitan los mismos que nosotros auto imponemos e intentamos tachar a otros por imponerlos, como cuando culpamos al gobierno por una propia idiotez conjunta.

Hace un tiempo vi una historia… la niña era quien jugaba cerca del pozo a pesar de que se le había negado el paso… la niña fue quien decidió mirar el fondo con curiosidad… Fue la niña quien tontamente pensó que nunca había fondo y cayó en el oscuro abismo hacia su fatal muerte, fueron los campesinos quienes escucharon el estruendo y el rey fue el enjuiciado, el rey fue culpable mientras la niña venerada…. No deberíamos poner en un pedestal a gente que no tiene conciencia de sus actos, que ignora las consecuencias de su estupidez.

¿Qué pasa cuando es el Rey quien ni siquiera pensó en poner advertencia?... ¿Deberíamos seguir culpándolo?… sí…. ¿Deberíamos venerar a la niña?… sí… ¿Por qué?, no lo ves supongo… no había una advertencia, no hubo alguien que le dijese que no se acercara… No hubo aldeano que desconociendo alguna regla la alejó del peligro, fue el rey insensato quien la dirigió a su muerte.

¿Puede haber culpables e inocentes?… sí, pero depende de cada quién… no todos tenemos la misma moral… no todos tenemos el mismo pensamiento incrustado… no todos tenemos las mismas barreras… somos una hoja en blanco esperando ser llenada, sea de abusos o cuidados, manchando o rompiendo nuestras hojas con cada experiencia… es nuestra decisión pensar quién fue el culpable y quién no pero no somos capaces de sentenciar a la culpa, indefensos en nuestro caparazón retrayendo nuestras propias ideas para escapar de los picos de los cuervos que atacan con conservar la “paz” autonombrada por aquellos quienes causan caos.

(no se en que categoría iría esto :P).