Hijo de la Soledad

nota: Esta obra no es mía es un escrito que encontré hace tiempo en internet. Todos los derechos están reservados a su respectivo creador 

No hay otra opción, soy hijo de la soledad. He sido creado para convivir con ella, para aburrirme, odiar, reír, despreciar y alabarla. No tengo amigos, no puedo convivir, conversar ni empatizar con nadie. No es que no quiera, simplemente no puedo. Mi destino está ligado a ella, mi boca está enredada con cadenas oxidadas que aprisionan las palabras de mi corazón, mi alma está con las manos en alto, gritando por su rescate, con la cabeza tratando de salir de las rejas, desesperada por ser vista y rescatada. La amistad, mis queridos amigos, no existe para mí.

Puede parecer extraño que les diga esto, más aún si me "conocen", pero soy solo una estrella en un cielo estrellado. Puede parecer que estoy rodeado de estrellas, por un montón de sujetos como yo, pero lo único que me rodea es la soledad y la oscuridad. Solo están en una ilusión causada por la distancia entre ustedes y mi alma.

El aislamiento no fue elegido por mí, nunca quise estar así. De niño imaginaba estar lleno de amigos, riendo y llorando juntos. Ansiaba tener una mano de respaldo y un hombro para llorar. Pero estoy destinado a vivir en soledad. No elegí la soledad, me elegí a mí mismo, y como consecuencia, no tuve más opción que aceptarla. Es el precio de ser auténtico, fiel a mí mismo, de amarme y elegirme por encima de cualquier otra compañía.

A veces tengo fantasías donde comparto mi soledad, donde me siento cómodo hablando de mí mismo. Me imagino charlando con alguien sobre sus dolencias, gustos, pensamientos y oscuros secretos guardados en su corazón. Me imagino siendo alguien con quien sería agradable charlar y tomar un café. Me imagino siendo uno en alma y corazón con alguien. Lástima que no suceda y no creo que llegue a suceder; una de las miles de razones por las cuales es muy probable que no pueda suceder es mi falta de empatía e interés por el otro individuo. Reconozco mi egoísmo, no quiero ser así, pero lo soy y es una de las razones por las que estoy solo. La desconfianza también juega un papel importante, además de que no me siento cómodo con nadie.

Pero tengo la necesidad humana de querer hablar y ser escuchado, de amar y ser amado. Este soy yo, un simple ser humano que es un poco despreciado, con el deseo de un día compartir su soledad.