Introspección

  Como breve introducción quiero aclarar que no soy ningún tipo de profesional en relación a la psicología, porque si bien uso términos de dicha área, esta es solo una reflexión que empezó a rondar mi cabeza y quise compartir aquí jijiji

  Ahora sí:

  Me puse a pensar que es muy fácil notar los errores desde afuera, los patrones de comportamiento dañinos. Ser espectadores nos permite analizar aquello que nos disgusta. Podemos notar cuando un gesto nos resulta grosero, desagradable, deshonesto, inlcuso antihigiénico.

  Esto, personalmente, me ha permitido dejar (evitar) ciertas acciones que me causan inquietud. Además, he notado que mucha gente ni siquiera se detiene a analizar su propio entorno, mucho menos a su propia persona. Por ejemplo, me ha incomodado presenciar personas que piden (casi exigen) cosas como dinero y regalos a otras personas como si se les debiera el favor y como si no fueran gran cosa. Gracias a esto aprendí a ser cuidadosa a la hora de pedir cosas, he logrado comprender lo difícil que es obtener cosas y que no puedo andar por la vida pidiendo y pidiendo.

  El ejemplo anterior fue solo la semilla de la que surgió esta idea tan compleja. Puedo pensar en ciertos aspectos que he cambiado luego de observar mi entorno, de descubrir con qué estoy de acuerdo y con qué no. Aunque no soy quien para juzgar, pero opino desde mi propia visión de lo moral y ético. Este tema abarca tanto que esto que estoy escribiendo no es más que la diminuta punta de un inmenso iceberg; es infinito.

  Regresando al tema central: No puedo vivir de lo ajeno, ¿tener un rasgo desagradable y no cambiarlo, ni siquiera notarlo simplemente porque no lo he visto en alguien más? Yo creo que no está bien, pues también hago cosas que molestan y desagradan a otras personas (nunca le voy a caer bien a todo el mundo, con esto me refiero a cosas que son calificadas como erróneas con justa razón), así que yo también debo observarme para encontrar y cambiar esas actitudes más que innecesarias.

  Pero sé que no soy perfecta, jamás lo seré. Sin embargo, poco a poco he aprendido a ser una mejor versión de mí. Incluso si tropiezo con la misma piedra varias veces, es normal cometer e incluso repetir errores. Lo importante es cómo resuelvo cada situación, cómo asumo y enfrento las consecuencias sacando una lección aprendida de aquello.

  Si te tomaste en leer este tremendo texto, gracias. Que tengas bonito día. :)