Tengo el alma destrozada de tanto
sollozar; anhelando que nada malo
volverá a pasar. Aún con el espanto
que me das, deseo así tu amor recuperar.
La oscuridad oculta mi temor,
mis lamentos incrementan el dolor.
¿Es acaso esto amor? Ya no soporto
el ardor que a mi cuerpo provocas.
Hacia mi puericia te acercaste,
tanto que sin salida me dejaste.
Todas tus penas libraste, y a mi
pureza pobre manchaste. Mi guía
apagaste, y a vos poco te ha de importar
con tal de obtener tu felicidad.
Mi puericia desprecia el obsequio que le das; Ojala te han de decapitar.
Recuerdo el aroma que traías,
una mezcla de alcohol y pasión.
Viniste hacía mi con una sonrisa,
que desde lejos se te veía.
El llanto no se ha de apagar
como en mi piel tus cigarros.
Mi ropa debo cambiar,
pues siempre me la has de quitar.
El paso del tiempo no podrá
exterminar todo aquello que dejaste.
A mi madre le he podido contar
como toda mi niñez te llevaste.
d1ckbri
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